Casi cuatro años y 10 meses después del ataque terrorista a la estación de Policía del barrio San José, en el suroccidente de Barranquilla, atentado que dejó 6 policías muertos y más de 40 heridos, el dolor revivió para las familias con la libertad decretada para los tres únicos capturados: Cristian Camilo Bellón, Nilson Mier Vargas y Dalila Duarte Martínez.

Los enjuiciados, recluidos en las cárceles 'La Tramacúa', en Valledupar; Cómbita, en Boyacá, y El Buen Pastor de Barranquilla, recobraron la libertad por vencimiento de términos.

Para Candelaria Márquez Navarro, madre de Yosimar Márquez, uno de los patrulleros  muertos en el atentado, la decisión judicial le trae a la memoría los tristes días de finales de enero de 2018.

Dijo sentir “un dolor muy grande en el alma, porque este es un dolor que me volvió a renacer como si hubieran puesto la bomba ayer”. 

“Que la muerte de mi hijo quede impune. Que no se sabe por qué, nadie sabe nada. Nadie nos dice por qué queda impune, que no se sabe si hay o no hay pruebas.  No sé", anotó 

Con la tristeza reflejada en el rostro, la mujer de origen sucreño, pero radicada en Barranquilla, sostiene que perdió a su hijo “y también perdí la batalla del juicio”. 

En los lamentos de esta adolorida madre víctima de la violencia guerrillera, siente impotencia cuando ve que la muerte de Yosimar y de sus compañeros, va camino a la impunidad porque los señalados recobran la libertad. Incluso, señala que aún siendo un policía, con su muerte no habrá justicia.

“Lo perdí y nadie me lo va a recuperar. Pensaba yo que porque mi hijo era un servidor público, de pronto tenía justicia. Perdí a mi hijo y perdí todo".

Con la resignación de que Yosimar no volverá, también se lamenta Candelaria de la falta de respaldos de la Policía Nacional en el proceso judicial.

“Pensamos que la institución nos iba a ayudar, pero nos dejaron solos, no nos aportaron, nos dejaron a la deriva. Íbamos allá y no nos querían recibir porque mi hijo ya no está en la Policía”.

Candelaria y los demás familiares de policías fallecidos “ya esperaban” que los tres capturados recobraran la libertad y lo peor, tener claros que si los liberan "más nunca los volverán a capturar, no se van a dejar capturar".

Consideran que en efecto, el juez programaba las audiencias en fechas muy lejanas y “ponía muchas excusas”.

“Si hoy le cambiaban el abogado a Cristian Camilo Bellón, él (el juez) decía que no había audiencia, porque el abogado decía que no conocía el proceso. Si le cambiaban el abogado a Dalila Duarte, también era lo mismo”.

Todo esto lleva a la madre de Yosimar a lanzar una frase también lapidaria: “Ellos están libres y mi hijo muerto”. 

En el atentado fallecieron el mismo día los uniformados Freddys Echeverría, Yosimar Márquez Navarro, Freddy de Jesús López Gutiérrez, Anderson René Cano y Yamil Rada Muñoz;  y a la semana del hecho se produjo la muerte del sexto policía tras luchar por su vida en un centro asistencial. Se trataba de Willy Rhenals Martínez.